Parroquia de San Millán y San Cayetano - Madrid, Madrid

Set C.

La iglesia comienza a construirse en el año 1669 por el arquitecto Marcos López. Las obras son probablemente continuadas por José de Churriguera y Pedro de Ribera. Sin embargo, el templo no fue terminado hasta 1761, a cargo del arquitecto Francisco de Moradillo.

La fachada, levantada por Moradillo, fue construida en granito, componiéndose de ocho robustas pilastras rematadas con capiteles de orden compuesto. Las pilastras de los dos extremos encuadran las dos torres y entre las cuatro del centro se disponen tres arcos de acceso de medio punto. Sobre los arcos de la fachada se colocaron en hornacinas ricamente decoradas las estatuas de san Cayetano, de Nuestra Señora del Favor, y de san Andrés Avelino, realizadas en piedra por Pedro Alonso de los Ríos.

La planta es de cruz griega, constando de tres naves y cuatro capillas cerradas con sus correspondientes cúpulas, más una gran cúpula central de tambor sobre pechinas. El retablo actual, realizado por Manuel Paradela Segade, imita modelos barrocos, con copias de cuadros famosos del Museo del Prado. La desnudez decorativa resalta la calidad de los detalles (ménsulas, pilastras, cornisas), y el enlucido claro dota al interior de una intensa luminosidad. En una de las capillas, bajo una sencilla lápida, se encuentra la sepultura de Pedro de Ribera, el arquitecto principal del edificio, que vivía en la casa frontera con la iglesia y fue feligrés de la misma toda su vida.

Luis M. C. M.

Bellísima iglesia, amplia y bien cuidada, situada en uno de los barrios más castizos de Madrid. En ella se encuentra mucha paz y guarda mucha historia. Vale a pena visitar y revisitar.

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Maravilloso templo católico situado entre los barrios de Lavapiés y La Latina, su planta es de cruz griega y está coronada con una gran cúpula de tambor sobre pechinas de estilo bizantino, su interior consta de tres naves y cuatro capillas cerradas con sus correspondientes cúpulas.
Iglesia barroca construida por Marcos López en 1672 y acabada por Pedro de Ribera en 1722 para los Teatino.

Germán P.

Es una iglesia hermosa e impresionante por lo monumental. Su ubicación no es tan buena debido a que no está cerca de ninguna vía principal pero está relativamente cerca de Plaza de Cascorro. Su fachada es de estilo barroco español con 3 nichos que contienen una escultura. Su interior es muy amplio y el retablo es de admirar, con varias pinturas religiosas.

Jota C.

Bonita iglesia barroca diseñada por el arquitecto Marcos López y continuada por Pedro de Ribera. Monumental fachada con una rica decoración. De su interior destaca el retablo mayor y la imagen de San Cayetano. El 7 agosto congrega a muchos fieles.

Ray F.

Iglesia barroca y para mí una de las mejores de Madrid, merece la pena verla por dentro.

Víctor M. G. C.

De la iglesia original sólo se conservan partes de la fachada, originalmente terminada en 1761, y restaurada después de la Guerra Civil. La calle Embajadores es demasiado estrecha para poder contemplarla en toda su grandeza. Cuando se comenzó en 1671, iba a convertirse en un despliegue barroco como no se conocía en Madrid, pero Moradillo, el último arquitecto implicado, eliminó gran parte de su exuberancia decorativa y la adocenó al darle aires de modernidad de acuerdo a la tendencia de la época: el neoclasicismo. El resto del edificio sucumbió al incendio provocado en el año 1936. Las ocho pilastras pétreas de la portada simétrica sustentan una cornisa quebrada y profusamente adornada. En los tres lienzos centrales de ladrillo enlucido se hallan sendas vistosas hornacinas, que, de izquierda a derecha, contienen estatuas en piedra caliza de: San Cayetano, la Virgen del Favor y San Andrés Avelino. La planta casi cuadrada, con atrio, tres naves y transepto central, es majestuosa y muy original. Está rematada por cúpula circular desprovista de toda decoración. En las capillas y el retablo del siglo XX, cuelgan copias de algunos cuadros que alberga el Museo del Prado. Son obras de Velázquez, Murillo, El Greco, Ribalta, Correggio, etc. El primer titular de la iglesia, San Cayetano, cofundador de la Orden de los Teatinos en el siglo XVI, está representado en una estatua vestida que trajeron los miembros de esta Orden en el siglo XVII. Se encuentra en el muro del Evangelio junto a la cabecera. Justo en frente, en el lado de la Epístola, está la imagen de San Millán, el otro santo titular de esta parroquia desde el derribo de la que llevaba su nombre cerca de la Plaza de la Cebada en 1869. Una talla moderna de San Cayetano, idéntica a la antigua, procesiona el 7 de agosto, fecha en que comienzan las fiestas del barrio de Lavapiés, que continúan con San Lorenzo el día 10 y finalizan con la Virgen de la Paloma el 15. Dentro del templo está enterrado Pedro de Ribera, que habitó el inmueble que se halla al otro lado de la calle Embajadores. El castizo arquitecto supuestamente nació en la calle del Oso, que configura la esquina del edificio. El propio Ribera y su rival Churriguera pudieron intervenir en el diseño de la iglesia, pero desde luego no creo que se sintieran orgullosos del resultado final. Con todo, se trata del único monumento religioso que merece la pena visitarse en el barrio madrileño de moda en el siglo XXI, siempre que se tenga en cuenta que la fachada proporciona una vista forzada pero incomparablemente más hermosa e interesante que todo el reconstruido interior y su contenido.

Ana V.

Exceptional, una misa organizada y con participación de pequeños y adultos en la lectura. Con pantallas para leer el evangelio, las oraciones y los cánticos.
Muy bien pensado.